Los patrones gráficos son las piedras angulares del análisis técnico. Pueden indicar continuaciones, reversiones o puntos de ruptura:
Triángulos (simétricos, ascendentes y descendentes): estos patrones señalan acumulación o distribución y pueden provocar rupturas significativas.
Cuñas (ascendentes y descendentes): son similares a los patrones de triángulos, pero generalmente indican inversiones.
Ampliación de máximos y mínimos: estos patrones indican una creciente volatilidad y posibles cambios de tendencia.
Brechas (ruptura, fuga y agotamiento): las brechas representan áreas donde no se realizan transacciones, lo que ofrece información sobre el sentimiento del mercado.